El lastre del progreso: las baterías
No es justo hablar de las baterías actuales comparándolas con las del pasado, el uso que hacemos ahora y entonces es totalmente diferente, pero sí es cierto decir que son el gran problema de los smartphones actuales.
El que más o el que menos se ha quejado en algún momento de que tiene que cargar el móvil todos los días, e incluso un par de veces, dependiendo del uso que se le de. Y es que la evolución de las baterías ha sido grande aunque no lo hayamos percibido, el mayor uso del móvil, una pantalla mucho más grande, procesadores más potentes y a la vez un diseño más fino y menos pesado hacen que cada vez se le reclame más a la batería de Ión litio que tiene un recorrido limitado y estamos llegando al final de él, además de ser caras, con gran sensibilidad a altas temperaturas y un reciclaje costoso.
Alternativas
Aunque muchísimas son las alternativas que se escuchan día tras día, la verdad es que son proyectos a muy largo plazo para las necesidades actuales. Eso sí, las opciones son muy interesantes, desde baterías de hidrógeno, propuesta de Apple hasta paneles solares instalados en los dispositivos, pasando por la pila de metanol, batería de litio-aire, nanotubos de carbono…
Pero si de alguno hemos oído todos hablar es del grafeno, muchos artículos se han escrito sobre este material que está llamado a ser uno de los actores principales en un futuro cercano en el mundo de la tecnología. Y es que sus características lo hacen idóneo para aumentar la autonomía de los dispositivos y alcanzar los 10.000 ciclos de carga, además, permiten un tiempo de carga de entre 5 y 10 segundos. Por último, su tamaño no es un problema dado su espesor de un solo átomo.
No nos queda más que esperar a que alguno de estos proyectos salga adelante y mientras tanto tendremos que tener paciencia y utilizar cargadores portátiles para aquellos que hacen mucho uso de sus móviles.